“Todos dijeron que las sanciones son ilegales, que violan Carta de la ONU (Organización de las Naciones Unidas) y obstaculizan la recuperación económica”, aseveró Ushakov, al margen de la cumbre del Grupo de los Veinte (G20), que se celebra el 15 y el 16 de noviembre en la ciudad australiana de Brisbane (noroeste).
El funcionario ruso, al destacar el apoyo que brindan los líderes de BRICS a Moscú, criticó las sanciones y rechazó implicación del Kremlin en los acontecimientos del este de Ucrania. La delegación rusa ha aprovechado esta cumbre para insistir en que Moscú no ha tomado ni toma parte en la reciente escalada de la actividad militar en la región de Donbás y que apoya la implementación del alto el fuego acordado en Minsk, capital bielorrusa, el pasado mes de septiembre.
Por su parte, Estados Unidos y sus aliados durante esta cita amenazaron al Kremlin con sanciones adicionales, si las autoridades de este país no dejan de apoyar los prorrusos del este de Ucrania. Durante la jornada del sábado, cuando Putin entró en la sala y se acercó al primer ministro de Canadá, Stephan Harper, para saludarle, Harper le dijo que te doy la mano pero solo tengo una cosa que decirte “debes salir de Ucrania”, citó Jason MacDonald, portavoz de Harper.
El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, afirmó que la “agresión” de Rusia contra Ucrania “es una amenaza para el mundo”. Además, Angela Merkel, canciller alemana, apostilló que la Unión Europea (UE) está estudiando imponer más sanciones económicas contra individuos rusos. Estados Unidos y la UE han impuesto varias rondas de sanciones contra los individuos y sectores rusos, alegando la implicación de Moscú en el conflicto ucraniano, que inició tras la reincorporación, el pasado mes de marzo, de la península de Crimea (al sur de Ucrania) a Rusia mediante un referéndum.
Agencias Prensa HSPTV AIP PM RMP
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