Según indicó el profesional del diario que se encuentra en la Región de la Araucanía cubriendo los sucesos desencadenados tras el crimen del joven estudiante, el arresto se produjo cuando la manifestación comenzaba a disolverse ante el inminente accionar brutal de los efectivos policiales.
En ese momento, efectivos de las Fuerzas represivas del Estado chileno procedieron a rodear a los manifestantes con un amplio dispositivo que incluyó seis carros policiales, y detuvieron a 16 personas, quienes fueron trasladadas hasta la Segunda Comisaría Urbana ubicada entre las calles Claro Solar con Guillermo Cruz.
El periodista del diario gobiernista La Nación relató que fue detenido en el momento que fotografiaba el arresto de la madre y hermana de Catrileo, la que se produjo con golpes por parte de funcionarios policiales, según constata el profesional.
Ambas familiares del estudiante fallecido fueron dejadas en libertad durante la noche. En cambio, Garay quedó arrestado en un calabozo donde asegura haber recibido malos tratos -presenta una lesión en una de sus manos- y fuertes insultos por parte de las fuerzas especiales que lo custodiaban, las que provenían de Santiago, según ellos mismos indicaban. Según Garay, los efectivos policiales exigían el dispositivo de memoria de la cámara fotográfica con que captó el momento de la detención de los familiares de Catrileo.
El periodista fue dejado en libertad esta mañana, previa formalización del Ministerio Público de la zona por “desórdenes públicos”, abriendo una investigación que deberá revisar las grabaciones de distintos puntos de la manifestación para determinar si se confirma o rechaza la imputación.
Agencias LN AIP JPMM
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