Los estadounidenses están cansados de armas de fuego y violencia. Cientos de ciudadanos estadounidenses acudieron a una convocatoria de la policía del Condado de Miami-Dade para entregar sus armas de fuego. Aquí no se hacen preguntas, ni se toma información. Lo importante es evitar que estas armas terminen en las calles o algo peor.
Según Francis Suárez, alcalde de la ciudad de Miami, recientes masacres como la ocurrida en la secundaria Stoneman Douglas ocasionan una transformación en la opinión pública con respecto a las armas y la violencia.
De ahí que este abuelito (en el video) decidió deshacerse de sus armas y rendirlas ante las autoridades a cambio de un cupón de 50 dólares por arma.
Fuentes aseguran que en Estados Unidos hay más de 360 millones de armas de fuego en manos de la población civil. Otras fuentes, sin embargo, duplican, incluso triplican dichas cifras. De ahí que no es coincidencia que los incidentes de violencia armada en el país se han convertido en una macabra rutina de muerte que beneficia exclusivamente a los fabricantes de armas.
Y aunque eventos como este representan una oportunidad en beneficio de las comunidades, aún queda mucho por hacer para evitar que las balas sigan cobrando víctimas inocentes.
Por Marcelo Sánchez, Miami.
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