viernes, 5 de abril de 2013

FIDEL CASTRO Y EL CONFLICTO DE LA PENÍNSULA COREANA


El conflicto en la península coreana es “un hecho tan increíble y absurdo”, ha advertido este viernes el líder de la Revolución Cubana, Fidel Castro, para luego enfatizar que evitar una guerra entre las dos Coreas es deber de toda la humanidad, ya que la mayor parte de la población de planeta habita en la región Asia-Pacífico. 

Castro ha destacado que una posible guerra nuclear en la región asiática provocará grandes sacrificios en los pueblos de ambas partes de la península, además de que afectará a más del 70 por ciento de la población del planeta. 

El líder cubano, tras señalar que Estados Unidos tiene la responsabilidad de evitar este enfrentamiento bélico, advirtió de que el estallido de una eventual guerra entre las dos Coreas significaría que “el Gobierno de Barack Obama, en su segundo mandato, quedaría sepultado por un diluvio de imágenes que lo presentarían como el más siniestro personaje de la historia de Estados Unidos”. 

 Recordó también que la guerra en la misma región asiática en 1950 se cobró la vida de millones de personas, así mismo se refirió a los bombardeos atómicos lanzados por EE.UU. sobre las ciudades japonesas de Hiroshima y Nagasaki que dejaron cientos de miles de personas muertas. 

Las declaraciones de Castro se han producido después de que varios países y organizaciones del mundo llamaran a ambos países vecinos a mantener la serenidad y la paz. La tensión entre las dos Coreas provocada por las sanciones de la ONU contra Corea del Norte se agudizó cuando Estados Unidos y Corea del Sur iniciaron maniobras militares conjuntas (el 11 de marzo) en la región. 

En respuesta, Pyongyang, que acusa a EE.UU. de estar detrás de dichas tensiones, anunció el “estado de guerra” contra Seúl y amenazó que cualquier provocación por parte de surcoreanos o estadounidenses causaría un devastador conflicto nuclear. 

Por su parte EE.UU., que desempeña un papel crucial en el agravamiento de la crisis entre las dos Coreas, envió a la región peninsular asiática sus bombarderos B-52 y B-2, con capacidad nuclear, cazas furtivos F-22. Además, el destructor ‘USS Fitzgerald’ y, posteriormente, los destructores ‘USS John McCain’ y ‘USS Decatur’. 

Agencias  Prensa  AIP  HSPTV  PM  RMP
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