Si bien algunas naciones pretenden agravar la situación política y humanitaria en Siria, el resto del mundo insiste en la solución política para solventar la crisis que azota al país árabe desde el pasado marzo de 2011.
El presidente del Consejo Europeo, Herman Van Rompuy, rechazó el jueves cualquier solución militar, al tiempo que insistió en una vía política para acabar con la violencia en el país árabe. “No hay ninguna solución militar para el conflicto”, dijo Van Rompuy en Pekín, capital china, después de la cumbre China-Unión Europea (UE) en torno a la crisis en Oriente Medio, así como a otros temas internacionales.
En este mismo contexto, el ministro brasileño de Exteriores, Luis Alberto Figueiredo Machado, anunció que “los propios sirios deben resolver la crisis”. “Y nosotros como miembros de la comunidad internacional tenemos que crear las condiciones para que los diferentes grupos en Siria se pongan de acuerdo y lleven a cabo conversaciones con el Gobierno”, agregó el canciller brasileño después de una reunión con su homólogo ruso, Serguei Lavrov, en Moscú, capital del país euroasiático.
Lavrov, a su vez, volvió a reiterar que el pueblo sirio es quien debe resolver la crisis del país árabe, sin ningún tipo de intervención foránea. Desde hace casi tres años, Siria es escenario de una ola de violencia terrorista, financiada y dirigida desde algunos países occidentales y varios regionales. El conflicto, según las Naciones Unidas, ha dejado un balance de más de 100 mil muertos.
Agencias Prensa PM RMP AIP HSPTV
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