Organizaciones indígenas ecuatorianas investigan el asesinato de quince miembros de la comunidad Waorani a manos de madereros, en la región amazónica del país.
Enrique Eguime, dirigente Waorani, asegura que la aparente masacre se produjo cuando un miembros de una tribu trataron de detener a un equipo de madereros ilegales que pretendía cortar árboles en el Parque Nacional Yasuní.
Según informes, entre los muertos habrían mujeres y niños, quienes habrían sido decapitados. La policía de Ecuador dijo que no puede afirmar o negar el hecho, ya que no tiene medios para realizar la búsqueda en una zona tan remota y de difícil acceso.
La región cubre una extensión de 700.000 hectáreas.
Mientras tanto un grupo de indígenas pertenecientes a comunidades selváticas partió en dirección a la región, aunque según el informe del periodista, Daniel Schweimler, su llegada a la zona se ha dificultado por las fuertes lluvias.
La zona en la que se cree ocurrieron los hechos es rica en especies maderables valiosas. También guarda importantes reservas petroleras. Se estima que hay depósitos equivalentes a cerca de 1.000 millones de barriles.
El presidente de Ecuador, Rafael Correa, le ha solicitado a la comunidad internacional compensación financiera por el ingreso perdido al no llevar a cabo la explotación petrolera en las zonas protegidas.
Agencias DS AIP JPMM
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