Nueve personas detenidas fue el saldo que dejó la manifestación de mujeres mapuches que se lanzaron a una de las piletas ubicadas en la Plaza de La Ciudadanía, frente al Palacio de La Moneda, en pleno centro de la capital chilena.
Las mujeres estuvieron durante una hora y 30 minutos al interior de la piscina cantando consignas en apoyo al pueblo mapuche y, en especial, a Patricia Troncoso, quien lleva 105 días en huelga de hambre.
Una de las manifestantes señaló que "nos reunimos acá porque nuestras comunidades están siendo reprimidas diariamente con allanamientos", y agregó que "Michelle Bachelet vaya a un sicólogo, porque me parece que quedó con secuelas cuando fue torturada junto con su madre".
Carabineros, mientras esperaba que las manifestantes salieran del agua, detuvo a seis personas por desplegar un lienzo y apoyar a la protesta. Una de las detenidas, era Carmen Barrera, esposa del abogado de Derechos Humanos, Hugo Gutiérrez.
A las 13:15 horas las manifestantes decidieron salir del agua, pero una de ellas fue rápidamente detenida y llevada al carro de la policía militarizada chilena. Finalmente personal de Fuerzas Especiales intervino ingresando a la pileta y llevándose a las dos mujeres, frente el repudio de la gente que estaba ahí presente.
Horas antes, la Asamblea Nacional de Derechos Humanos, representada por el abogado Hugo Gutiérrez, llevó una carta a La Moneda solicitando una audiencia con la Presidenta Michelle Bachelet con el fin de revisar la situación de Patricia Troncoso.
Respecto a la condición en que se encuentra la luchadora de la causa mapuche, el abogado sostuvo que "si le pasa algo, desde ya nosotros decimos que la responsabilidad completa es de la Presidenta de la República. El gobierno tiene que tomar cartas en el asunto y no se puede seguir haciendo el leso, cuando hay una persona que está sufriendo".
El abogado dijo que Troncoso, quien se encuentra en el Hospital de Chillán, estaría siendo obligada por Gendarmería a recibir suplementos alimenticios. Luego de una conversación con el obispo Carlos Pelegrini, éste le habría contado que la mujer había sido amarrada de brazos, pies y cuerpo entero a la camilla.
"La Chepa" pide que se le reconozca el derecho a la salida diaria, ya que según Gutiérrez, es inocente y está condenada por un delito que no cometió. "Aquí hay una condena que nos parece injusta y requiere de una reivisión para que quede en libertad con la mayor rapidez", dijo el abogado.
Agencias LT AIP JPMM
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