“Los países del ALBA-TCP reiteran su enérgica condena al golpe de Estado, reafirman su apoyo irrestricto y solidaridad con el Gobierno constitucional del presidente Evo Morales”, indica la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América - Tratado de Comercio de los Pueblos (ALBA-TCP) en un comunicado. En la nota publicada este lunes en Twitter por el canciller de Venezuela, Jorge Arreaza, la mencionada organización denuncia las amenazas y agresiones que sufrieron las autoridades bolivianas y sus familiares por parte de los “grupos radicales de la derecha” que buscaban “forzar la renuncia” del mandatario.
El ALBA también demanda respeto a los derechos civiles, la libertad y la integridad física de Morales, así como del equipo de Gobierno y de quienes “luchan en contra de los grupos radicales que pretenden sembrar el terror y hacerse del poder de manera violenta en Bolivia”. Además, la organización responsabiliza al excandidato opositor, Carlos Mesa, y al jefe del Comité Cívico de Santa Cruz, Luis Camacho, “de cualquier plan para asesinar al presidente Evo Morales”. Igualmente, en la nota se insta a la comunidad internacional a “rechazar el golpe de Estado y a exigir por la garantía de la seguridad del presidente Evo Morales y demás autoridades”.
Morales anunció el domingo su dimisión tras la ola de violencia perpetrada por grupos opositores que desconocen su reelección en los comicios del 20 de octubre. El mandatario boliviano denunció desde un principio el proceso de un “golpe de Estado en marcha” contra su gobierno, y en un intento para pacificar el país, llamó al diálogo y convocó nuevas elecciones, pero la oposición siguió adelante con su agenda violenta, lo que finalmente obligó a Morales a renunciar para “preservar la paz en el país”.
Diferentes países desde Cuba, Venezuela, México, Nicaragua, Uruguay hasta Rusia y China expresaron su rechazo al golpe de Estado contra el Gobierno de Morales. El politólogo Noam Chomsky aseguró un día antes del golpe que EE.UU. coordinaba con la oposición para derrocar a Morales. Chosmky alertó que el centro de operaciones de la embajada de Estados Unidos en La Paz (la capital administrativa de Bolivia) dejó entrever dos planes en el país suramericano: “el ‘plan A’, un golpe de Estado, y el ‘plan B’, el asesinato de Morales”.
Agencias Prensa PM RMP PI HSPTV MP AIP
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